lunes, 11 de noviembre de 2013

No falta nada

Pues llegamos a la recta final, nunca mejor dicho. Faltan 14 días en los que ya poco se puede hacer. Esto es como el día antes de un exámen, lo estudiado estudiado está y lo que no.... Pues aquí igual. Los entrenos realizados hasta ahora son los que cuentan. En estas dos semanas que faltal para la maratón lo único que se debe hacer es entrenar suave  para no perder lo entrenado y descansar. Y cuando acabes de descansar... pues descansar más, nunca sobra. Como siempre me dice Miguel, que de esto sabe un ratín, como te plantes en la línea de salida cansado lo vas a pasar realmente mal. Da igual que vayas con el propósito de la marca de tu vida o con el objetivo de acabarlo simplemente. Ir cansado antes de 42 km es un suicidio. Dicen los que saben que hay que llegar con "hambre de correr".
En este período de entrenamiento hubo un poco de todo. El primer més fue de lo más esperanzador, con las pilas cargadas y animicamente fuerte, todos los entrenos salían a pedir de boca. Luego vino la lesión y el problema del estómago que hicieron que el segundo mes fuera un calvario y me plantease incluso el no ir. Por suerte llevo 20 días bastante buenos de entrenos en los que me encontré bien y volví a recuperar buenas sensaciones y lo más importante: las ganas de correr el maratón.
Obviamente no llegaré al objetivo inicial ya que la preparación no fue por los derroteros correctos pero bueno, intentaremos mejorar la marca del primer maratón. Con eso digamos que me daría por satisfecho.

Este es el plano de la carrera. Consta de una pequeña vuelta de 6 km y luego dos vueltas a un circuito de 18 km. Como veis las dos vueltas grandes tienen un paso por la playa de la Concha, cuando pase por ahí no se yo si podré disfutar del paisaje.

Espero que la siguiente crónica sea la de después de la maratón y sea para daros la chapa con un desenlace bueno jajajaj

adioooooos